
El paciente acude a clínica para una consulta sobre su sonrisa gingival, el comenta las carillas.
Tras la exploración obligada por si tiene alguna caries, estudiamos su morfología.
La opción más acertada en este caso es regularizar el hueso del maxilar superior, puesto que su volumen no permite bajar el labio, tras esta operación, recortamos la encía para que se vea más el diente y realizamos un blanqueamiento.
Aunque el tratamiento parezca sencillo, necesita tiempos de recuperación y microscopia para que quede perfecto.